sábado, febrero 19, 2011

Hace 100 años ...

Los jugadores con director del torneo en el Casino Municipal de San Sebastián

San Sebastián acogió en febrero de 1911 el primer gran torneo internacional de ajedrez que se recuerda. Entre febrero y marzo de dicho año los quince primeros jugadores del mundo se enfrentaron en el Casino Municipal de San Sebastián, a día de hoy casa consistorial.
Las normas del torneo señalaban que sólo podrían ser invitados los maestros de primer nivel, aquellos que, por lo menos dos veces, hubieran quedado en cuarta posición, en los torneos internacionales más importantes de los diez años anteriores. Un total de quince ajedrecistas cuya relación se señala en el cuadro adjunto, fueron los seleccionados.

José Raúl Capablanca
Akiba Kiwelewitch Rubinstein
Milan Vidmar
Frank James Marshall
Siegbert Tarrasch
Carl Schletcher
Aaron Nimzowitch
Ossip Samoilovich Bernstein
Rudolf Spielmann
Richard Teichmann
Geza Maroczy
David Janovsky
Amos Burn
Oldrich Duras
Paul Saladin Leonhardt

Los premios ofrecidos para los tres primeros fueron de 5000 francos oro al ganador del torneo, 3000 al segundo y 2000 el tercero. Hubo, igualmente un cuarto premio con dotación económica (1.500 francos oro), una dotación en función de los puntos obtenidos y un premio especial, el Premio de Brillantez a la partida más bonita dotada con 500 francos oro donados por el Barón de Rothschild. Además la organización se hizo responsable de los gastos de viaje de todos y cada uno de los jugadores.

El director del torneo, Jacob Mieses, fue el encargado de decidir sobre todas las reclamaciones que existieran durante las partidas. A los jugadores se les reservaba el derecho a pedir un arbitraje compuesto por tres maestros del ajedrez.

El vencedor del ‘Torneo de Campeones’ de San Sebastián, fue el cubano José Raúl Capablanca y Graupera. Después se proclamó campeón del mundo en 1920. Segundo fue el polaco Akiba Rubinstein y tercero el doctor yugoslavo Milan Vidmar.

Paralelamente, al ‘Torneo de Campeones’ se disputó, otro para aficionados que, a diferencia del principal, no tenía premios en metálico.
Este contó con la presencia de 12 jugadores y su vencedor fue el madrileño Luis Rodríguez Santa – María que terminó invicto con 9,5 puntos. Los otros dos cajones del podio los coparon, empatados con 9 puntos, el doctor Puig y Puig, de Barcelona y el jugador alemán Steinweg.
En quinto lugar quedó A. Hallgarten, cónsul alemán y conocido en Hamburgo como mecenas del ajedrez,  cuya participación fue vital para la organización del evento.

El Premio de Brillantez correspondió a la partida disputada en la 1ª ronda entre Capablanca y Bernstein, pudiendo seguirse la misma en el visor 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bonita efemerides.